Me llamo Dave Langlois y soy adicto al canto de las aves.
Uf, me ha costado pero ya está dicho.
Y una vez puesto, voy a decir algo sobre mi experiencia de este vicio social/natural. El gran problema que veo yo es la disponibilidad del estímulo por cualquier rincón de nuestro país por estas fechas – y encima gratis – y ni el gobierno ni la policía hace nada. En mucho más de una ocasión la Guardia Civil me ha pillado in flagranti a las cinco de la mañana y tuve la ilusión de que hicieran algo para ayudarme, criminalizando la actividad o penalizando los infractores, pero al final quedaron en mofarse de mi adicción y no hicieron nada. He seguido a rajatabla terapias de detoxificación, escuchando sonidos apuestos a su sirena belleza todo el día como películas dobladas, camiones en perpetuo revés, ratonas cargadas de rocas subiendo cuestas, motos de mocosos con el silenciador quitado y Rajoy diciendo “Eshpaña” en bucle, pero nada. No me rehabilito. Es pensar en la alegría espuria del pinzón, la caricia engañosa del mirlo, el subidón fácil del chochín, el chorro irrefrenable de la capirotada o el chute al fondo del ruiseñor y estoy otra vez en la calle cautivo de sus encantos envenenados.
Yo creo, sinceramente, aunque me cuesta decirlo en voz alta, que soy una causa perdida a estas alturas. Pero, os ruego encarecidamente, no dejéis que vuestros hijos salgan de casa en los próximos meses. Cerrad las ventanas a cal y canto; subid a tope el volumen de los televisores; id a todos los sitios en coche, también con las ventanas cerradas, y el tramo de casa a coche hacedlo con cascos puestos. Es la única manera de evitar esta terrible adicción, creed a alguien que ha sufrido las consecuencias, y, una vez caído, creedme otra vez, es muy pero que muy muy difícil salir de esto.
Gracias por escucharme.
He aquí uno de los culpables
English translation of the text:
BEWARE THE PERILS OF SPRING!
With spring coming on apace my old man would like to have a
few words about its perils:
Hello. My name’s Dave Langlois and I’m a birdsong addict.
Phew, that was hard, but I’ve done it.
And now I’ve broken the ice, I’d like to say something about
my own experience of this social/natural disease. To my mind the great problem
is the availability in any part of
our country at this time – and completely free to boot – and neither the
government nor the police does anything. On more than one occasion the Guardia Civil has caught me at it red-handed
at five in the morning and I did rather harbour hopes they might do something to
help me like criminalising the activity or penalising the perpetrators but all
they did was mock my affliction and move on. I’ve tried no end of detox
regimes, involving listening all day to awful sounds diametrically opposed to the
birdsong’s siren beauty, like dubbed films, lorries in perpetual reverse gear,
motorised skips laden with rocks grinding up slopes, the hornet scream of
2-stroke motorbikes with the silencers removed or, most taxing of all, a loop
recording of the President of Spain lisping “Eshpaña” endlessly. All to no avail. Rehab, in my case, says no. Sooner
or later I remember the cheap cheerfulness of the Chaffinch, the cunning caress
of the Blackbird, the quick fix of the Wren, the gorgeous gush of the Blackcap
or the mainline hit of the Nightingale and I’m out there again captive of their
venomous charms.
Quite honestly, much as it pains me to say it out loud, I reckon
I’m a lost cause by now. But please, I beg you, don’t let your children leave
the house for the next few months. Close the windows tight and turn up the
television flat out. Go everywhere in the car, also with the windows closed,
and wear mufflers from house to car. Believe me, as someone who suffered this
for years, it’s the only way. And, believe me again, once you’ve fallen in,
climbing out again is very very difficult.
Thanks for listening.
Ojalá hubiera mucha más gente como tú: el mundo sería un lugar mejor.
ResponderEliminarSomos bastantes, creo, pero los otros hacen más ruído y tienen más poder.
EliminarGracias por la visita
Genial
ResponderEliminar¡Muchas gracias!
EliminarNo te rehabilites nunca Dave, y seguir divulgando vuestras experiencias.
ResponderEliminarUn abrazo para los dos.
Ya te digo, causa perdida, amigo, causa perdida . . .
Eliminar¡Abrazos!
Amen!!!!.Un abrazo
ResponderEliminarPD:Yo tampoco puedo vivir sin las aves,soy un yonki de las aves,jejeje
¡Abrazos de los yonkis veratos!
EliminarEspero que no encuentres terapia para tus males, y ojala sea un virus que puedas extender aún más.
ResponderEliminarUn abrazo.
Vale, siempre que sufras en simpatía allí arriba en Galicia . . .
Eliminar¡Abrazos!