Desde la terraza del treparriscos se veía esto:
El sábado pasado fuimos a uno de nuestros sitios favoritos de alta montaña, allá en
el borde entre León y Asturias, llegando arriba a eso de las siete de la mañana. Este
año hemos ido unos 10 días más temprano que el año pasado y esta diferencia de
el borde entre León y Asturias, llegando arriba a eso de las siete de la mañana. Este
año hemos ido unos 10 días más temprano que el año pasado y esta diferencia de
tan pocos días se dejó notar mucho en el nivel de canto. Vimos 4 roqueros rojos y todos
cantaban bien, 2 de ellos con sus bonitos vuelos nupciales. Otro vuelo nupcial del que fuimos
testigos era él del bisbita arbóreo.
cantaban bien, 2 de ellos con sus bonitos vuelos nupciales. Otro vuelo nupcial del que fuimos
testigos era él del bisbita arbóreo.
En esta foto le pillé justamente en el momento de lanzarse a su vuelo tan bonito de paracaídas, cosa que hacía sin parar, incluso en una llovizna fina que caía.
Los escribanos cerillos también cantaban bien, pero esta es una especie que siempre canta hasta bien entrado el verano.
Nos llamó mucho la atención la cantidad de currucas mosquiteras cantando en manchas de piorno puro a 2000 m sin ningún árbol a la vista . Habremos oído unas 7 ó 8. También una curruca zarcera.
Las dos chovas con sus reclamos tan diferentes nos sobrevolaban todo el tiempo.
Chovas piquirrojas
En las zonas más abiertas con rocas había pequeños bandos de gorrión alpino, muy activos y algunos con el pico lleno de bichos para sus pollos.
Otro pájaro que oímos cantar y vimos bastante era el accentor alpino. Pero en este caso también había algunos jóvenes emancipados ya.
Pero para nosotros la verdadera estrella de estas alturas es el treparriscos. Es un pájaro tan carismático no solamente por su escasez sino también por el paisaje tan espectacular donde suele vivir, sus movimientos de ratoncito por el acantilado, agitando las alas y volando como una mariposa de hombros rojos. El año pasado localizamos su nido así que lo vimos entrar y salir a placer (desde la distancia por telescopio, por supuesto). Este año parece que tiene su nido por otro lado así que lo vimos un poco menos. Es un ave difícil de fotografiar por las distancias a las suele verse. Pero en esta ocasión tuve la suerte de que se me acercara bastante en uno de sus muchos vuelos de prospección por la zona y pude sacarle algunas fotitos que me hicieron muchísima ilusión. ¡Espero que os gusten!
Bonito blog. Me lo cuelgo en el mio para seguirte. ¿andas por el Oriente de Asturias?. Yo vivo en Llanes Mi blog es www.verderin.blogspot.com
ResponderEliminarUn saludo y suerte.
Javi
Hola Javier.
EliminarYo el verano los paso en Arriondas, está a unos 30km de Llanes.
Por cierto,¿Es posible que hubiésemos coincidido en un minicrucero con Gorka Ocio en el Pride of Bilbao?
Saludos
Sammy
Bueno, bueno... ¡¡Que cerquita ese trepa!! ¿A ver quién es el Golden Balls ahora?
ResponderEliminarUn abrazo.
Fantasticas fotos,los Gorriones alpinos una maravilla y el Treparriscos que decir del Treparricos una pasada.Saludos
ResponderEliminarTe encanta ponernos los dientes largos ¿no?.
ResponderEliminarEn serio, me gustan todas pero en el especial el gorrión alpino, y el treparriscos, !qué colorido tiene!.
Que te sea muy fructífera tu estancia por aquellas tierras. Un abrazo.
Sammy, la primera foto es TREMENDA!! Me encanta!! Y muy buenas las del trepa, gorriones y demás, ¡qué envidia! A ver si puedo sacar algunos diillas para subirme.
ResponderEliminarUn abrazo sureño
Un placer compartir esos momentos de alta montaña. Somos pocos los que subimos tal altos para disfrutar de las alpinas, pero la recompensa es inmensa.
ResponderEliminarSaludos Juankar.
Muchas gracias a todos.
ResponderEliminarLa verdad es que aquí en Asturias hay muchísimas cosas para hacer y una de nuestras preferidas es subir a la alta montaña, especialmente si hay un treparriscos esperándonos.
Abrazos
Sammy
Coincido con Rafa, la primera foto es magnifica. Qué refrescantes imágenes las de por allí arriba!!
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